viernes, 1 de agosto de 2008

Cuando de mi no quede sino un árbol...

MIGUEL OTERO SILVA


Siembra [fragmento]


Cuando de mi no quede sino un árbol,
cuando mis huesos se haya esparcido
bajo la tierra madre;
cuando de ti no quede sino una rosa blanca
que se nutrió de aquello que tú fuiste
y haya zarpado ya con mil brisas distintas
el aliento del beso que hoy bebemos;
cuando ya nuestros nombres
sean sonidos de eco
dormidos en la sombra del olvido insondable;
tú seguirás viviendo en la belleza de la rosa,
como yo en el follaje del árbol
y nuestro amor en el murmullo de la brisa…

2 comentarios:

Ceniciento Longinus Jose Luis Colombini dijo...

Porque solo un fragmento de Otero, quiero mas, no me dejen un sabor de poco en mis ojos. Parece un coitus interruptus, publiquen ma stextos de el para poder conocerlo y hacer un juicio valorativo d esu obra.

1964


Ya no es mágico el mundo. Te han dejado.
Ya no compartirás la clara luna
ni los lentos jardines. Ya no hay una
luna que no sea espejo del pasado,
cristal de soledad, sol de agonías.
Adiós las mutuas manos y las sienes
que acercaba el amor. Hoy sólo tienes
la fiel memoria y los desiertos días.
Nadie pierde (repites vanamente)
sino lo que no tiene y no ha tenido
nunca, pero no basta ser valiente
para aprender el arte del olvido.
Un símbolo, una rosa, te desgarra
y te puede matar una guitarra.


II
Ya no seré feliz. Tal vez no importa.
Hay tantas otras cosas en el mundo;
un instante cualquiera es más profundo
y diverso que el mar. La vida es corta
y aunque las horas son tan largas, una
oscura maravilla nos acecha,
la muerte, ese otro mar, esa otra flecha
que nos libra del sol y de la luna
y del amor. La dicha que me diste
y me quitaste debe ser borrada;
lo que era todo tiene que ser nada.
Sólo me queda el goce de estar triste,
esa vana costumbre que me inclina
al Sur, a cierta puerta, a cierta esquina.

Ceniciento Longinus Jose Luis Colombini dijo...

AH EL POEMA 1964 PERTENECE A JORGE LUIS BORGES